La Asociación de Inquilinos advirtió que la poca oferta y los altos precios constituyen un problema para conseguir alquileres en Misiones

GENERAL

Adrián Torres, presidente de la Asociación Misionera de Inquilinos, señaló que actualmente en la provincia existe un problema a la hora de conseguir alquileres debido a los altos precios y a la poca oferta.

En este marco destacó la necesidad de la modificación de la actual Ley de Alquileres con la intención de defender a los usuarios frente a “cambios ilícitos o perjudiciales”.

La escasa oferta sumada a los altos precios, constituyen un problema para aquellos que desean alquilar una propiedad. Torres recordó que arrendar siempre fue complejo pero que la inflación, la devaluación del peso, la vigencia de la nueva Ley de Alquileres y la especulación inmobiliaria suponen una combinación dificultosa para la economía de los trabajadores. “No se puede elegir, se obtiene lo que se consigue”, añadió.

Según el presidente de la asociación, las personas prefieren la firma de un nuevo contrato antes que respetar lo delimitado por la normativa ya que incluye un aumento del 50% del total. “Desisten de renovar para ajustar aún más yendo en contra de las posibilidades económicas del trabajador promedio”, mencionó.

Asimismo, Torres manifestó que es necesario la derogación de esta ley dado que la modificación de la normativa se dio en el marco de una década con inflación del 30% anual con salarios que se ajustaban de manera similar, por lo tanto se pretendía asentar un tope máximo para evitar grandes aumentos.

En ese sentido agregó que si el contexto se hubiera mantenido, sería útil pero, debido a la pandemia y a los problemas económicas, “la ley se convirtió en una incertidumbre total con falta de regulación y control”.

Por otro lado explicó que las parejas o familias no logran encontrar espacios con habitaciones porque en la actualidad son los monoambientes los más convenientes.

En tanto, sobre los estudiantes consideró que se enfrentan a la compleja tarea de hallar departamentos económicos y cercanos a las universidades y terciarios, enfrentándose a numerosos requisitos para ingresar a las viviendas y a esto se suma la poca oferta existente.

“Se puede revertir la especulación con leyes que controlen el mercado, pero parece que no se atreven porque pasó mucho tiempo y todavía no legislaron a favor de la gente que tiene la necesidad de tener un techo”, opinó.

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